Hace unos meses, algunos fabricantes alemanes de camiones y remolques nos encogían el ombligo por su intento de poner sobre las carreteras germanas (y a la larga sobre las de toda Europa) su nuevo concepto de transporte de mercancías por carretera: camiones de 25 metros de largo y 60 toneladas de peso máximo.
Tras varios meses de pruebas por Alemania, el parlamento europeo ha decidido no permitir que estos temibles dinosaurios motorizados sigan reproduciéndose.
Sin embargo, la negativa no parece basarse solo en los problemas de seguridad vial, de deterioro de las carreteras, de emisiones de gases y de molestias para los demás usuarios de la vía que podían acarrear estos monstruitos.
Lo que realmente se ha intentado proteger son los intereses económicos del transporte de mercancías por ferrocarril.
MotorFull
No hay comentarios.:
Publicar un comentario