Si entendemos por un geek -y según la definición de Wikipedia- “aquella persona con una gran fascinación por la tecnología e informática, abarcando los diferentes tipos de geek desde un nivel de fascinación normal hasta niveles obsesivos”, tal vez pensemos que los coches que conducen tienen que tener los últimos adelantos en materia de entretenimiento, comunicaciones y seguridad, aunque como se verá no es así, pero no hay que negar que algunos (no todos) tienen buen gusto y los billetes necesarios, por supuesto, para poseer bellas máquinas.
El primero que se viene a la mente es el inefable Bill Gates, fundador de Microsoft y dueño del 80% del planeta en cuanto a computadoras se refiere. Bill maneja un Porsche 911 Convertible de 1999 y posee además un Porsche 959 Coupé de 1988, uno de 230 en el mundo.
Michael Dell, el dueño del imperio Dell, no sale de su casa si no conduce su Porsche Boxster 2004 o su Hummer H2 del 2005. A Larry Ellison, CEO de Oracle le gusta la buena vida y goza conduciendo su Bentley Continental Flying Spur. Steve Jobs, dueño de la manzanita, conduce un Mercedes SL55 AMG curiosamente sin placas. Al parecer el señor Jobs goza de una libertad que al resto de los mortales nunca se nos reveló: conducir un coche sin placas y sin que nadie le diga nada.
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