Un problema que ha tenido la venta de la pastusa suprema ha sido el rechazo de los consumidores porque viene con tierra, a pesar de cepillarse previamente.
Un trabajo hecho 'con las uñas', escaso de recursos, pero con mucha entrega está a punto de irse al piso por culpa de los mismos consumidores.
Se trata de la papa, variedad pastusa suprema, la que hoy poco se vende en el mercado, pues los consumidores la encuentran 'sucia', es decir, con residuos de tierra y embolsada en polietileno.
"Otras variedades se consiguen totalmente limpias y sin residuos de ninguna índole, las que resultan atractivas para los compradores", dice Sonia Navia, presidenta de la junta directiva de la Federación Colombiana de Productores de Papa (Fedepapa).
Sin embargo, en un último esfuerzo, el gremio de los paperos quiere darle una nueva imagen al producto, en espera de que se incremente el consumo; ahora vendrá empacada en fique, limpio y bien presentado; es más, llevará impresa la bandera de Colombia y el logo de Fedepapa, en 'bultos' de 2,5 y 5 kilos.
"De esta forma. queremos salvar el trabajo que hicimos en el gremio y el de 1.050 papicultores que hoy están dedicados al cultivo de esta variedad", dijo Navia.
Entre otras fortalezas -agregó la dirigente gremial- la pastusa suprema, es una papa lo más 'ecológica' posible, pues los cultivadores respetan los tiempos de residualidad o de carencia, es decir, que hasta 80 días antes de la cosecha no aplican productos químicos, como insecticidas o herbicidas, lo que permite que al consumidor le llegue un producto 'sano'.
Además, la variedad es resistente al ataque del hongo Phitoptora infestans, que produce la enfermedad de la gota o tizón tardío de la papa; así reduce también la aplicación de fungicidas en los lotes.
Articulo: El Tiempo
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